*Inti Rodríguez
El pasado 09 de junio Provea presentó en Caracas su tradicional Informe Anual, correspondiente al período enero-diciembre de 2014, en el que se monitorean los avances, estancamientos y retrocesos en 14 derechos humanos en el país. Como siempre, esta investigación se sustentó fundamentalmente en la propia información oficial publicada por los distintos entes del Estado.
La principal preocupación reflejada en el Informe de Provea es el acelerado aumento de la pobreza y el retroceso generalizado en derechos sociales. En materia de pobreza, salud y vivienda, estos son algunos de los datos recopilados por Provea:
Para el 2013, según la última cifra oficial publicada por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), 9.174.172 personas vivían en situación de pobreza en el país, es decir, cada hora, 48 familias venezolanas se suman al umbral de pobreza. La gestión del Presidente Nicolás Maduro ha revertido, en apenas 2 años, los logros que en materia social se alcanzaron durante la gestión del Presidente Chávez.
La caída del ingreso de las y los trabajadores, debido a las constantes devaluaciones de la moneda y el alto índice de inflación en el país, contribuyeron en un 35% al crecimiento de la pobreza en Venezuela, según indicó la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) en su informe anual publicado en 2014. En 2 años de gestión del Presidente Maduro se registra una inflación acumulada de 124,7%, mientras que en un período de 5 años (2008-2012) la inflación acumulada alcanzó 130,9%. En alimentos la situación es dramática. 2014 cerró con una inflación de 102,2% en alimentos, lo que junto a la escasez y desabastecimiento de productos encareció aún más la canasta alimentaria e imposibilita que los salarios sean suficientes para cubrir el costo de la misma. Entre 2008-2012 (5 años), se registró una inflación acumulada en alimentos de 152,5%, mientras que en 2 años de gestión de Maduro la inflación acumulada se ubica en 176,1%.
En materia de derecho a la salud, las precarias condiciones en las que se encuentra la atención sanitaria en Venezuela compromete el bienestar físico de la población y de muchos grupos de personas cuya vida está enlazada con la disponibilidad de recursos médicos. A su vez, el empeoramiento de estas condiciones está conduciendo a que los costos de las deficiencias y la escasez se trasladen al bolsillo de las personas y de sus familias, haciendo cada vez más restrictivo el acceso a la salud de los sectores de menores recursos. Nunca antes en la historia reciente del país, la cobertura de la medicina privada ha tenido tanto crecimiento, como el registrado durante los últimos años. La Asociación de Clínicas y Hospitales Privados calcula que para el año 2014 sus 236 clínicas afiliadas cubrían más del 50% de la población usuaria. Apenas hace 4 años el promedio rondaba menos de 20%. Por ello, afirmamos que la gestión de Nicolás Maduro está privatizando la salud por la vía de los hechos.
En materia de vivienda para el año 2014 la Gran Misión Vivienda Venezuela (GMVV) logró levantar sólo 64.680 viviendas, lo cual constituye una reducción del 67,9%, respecto a lo registrado en 2013. Según la totalización realizada desde el año 2011, fecha de inicio de la GMVV, hasta diciembre del año 2014 se habrían construido 611.856 viviendas, es decir un promedio anual de 152.964 casas. Esta cifra representa el cumplimiento de la mitad de la meta anunciada por el presidente Hugo Chávez el 13 de febrero de 2011, cuando anunció la creación de dicho programa. En esa oportunidad prometió la construcción de 2.000.000 de viviendas en 6 años, lo que implicaba la construcción de 333.333 por año.
*Coordinador de Investigación de Provea
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