Miguelanagel CaballeroLas redes sociales como instrumento de multiplicación o expansión de la información son un gran aliado para los diferentes grupos sociales del mundo, herramientas de amplio alcance e impacto como Twitter y Facebook se han convertido en plataformas que usadas de manera correcta pueden ayudar a denunciar o poner en evidencia una violación de Derechos Humanos.

Desde el pasado 12 de febrero cuando el descontento social se hizo visible a través de un conjunto de manifestaciones de diversos sectores venezolanos, pudo observarse el comportamiento de los ciudadanos en las redes sociales, en particular en Twitter. El vaivén de datos sumado a la tensión emocional por las lamentables muertes de algunos manifestantes, los violentos y sucesivos ataques de los funcionarios de seguridad del Estado y grupos armados al margen de la ley a conjuntos residenciales o manifestantes apostados en calles y avenidas, generó mucha información o material audiovisual; como fotos y videos que sirvieron para denunciar las violaciones de los Derechos Humanos de los venezolanos.

Muchas fueron las cuentas “fake” o cuentas falsas que aprovecharon la crisis social venezolana para dar más proyección a sus perfiles por múltiples propósitos. Lograron filtrar fotos, videos e informaciones erradas o distorsionadas, que nada tenían que ver con el contexto de las protestas en el país. Ese material se tomó de diversas manifestaciones y actos violentos en países como Brasil, Chile y Siria. Gaby Castellanos reconocida publicista, con amplios conocimientos en los entornos digitales, radicada en España, publicó un artículo donde alertaba sobre este fenómeno tan dañino para el sector que genuinamente expresaba sus opiniones y a la vez denunciaba los abusos de los que fueron víctimas, por lo cual calificó estas acciones como “delito de difamación, tergiversación, forjamiento de imágenes, desinformación y desacreditación”.

En Venezuela grupos al margen del ordenamiento jurídico venezolano se han dedicado a usar información falsa para difamar, calumniar o desacreditar a muchas personas, empresas o instituciones, para ello usan las redes sociales como medio para delinquir y es importante recordar que en Venezuela existe una Ley contra los Delitos Informáticos que sanciona las infracciones que se cometen a través del usos de equipos tecnológicos e internet.

En Provea nos preocupa esta tendencia que afecta las denuncias genuinas en materia de DDHH y por eso nos permitimos hacerlas siguientes recomendaciones:

-Así como en la vida offline hay que contrastar las informaciones, ir a la fuentes bien sea vivas, documentales, especializadas, públicas o privadas. En las redes sociales hay que hacer lo mismo para evitar replicar rumores sin fundamento o noticias falsas que puedan causar un daño irreparable a la dignidad de una persona, empresa o grupo social. No hay que ser vocero de las mentiras. Parece una tarea difícil porque en Venezuela existe 11.6 millones de cuentas de Facebook y al cierre de 2013 existían 3.3 millones de usuarios de Twitter, pero debes conocer la procedencia de los datos.

-Es nuestra responsabilidad el uso y el abuso que le damos a los medios interactivos. Si eres capaz de agregar imágenes o videos a alguna red social o algún dominio en la red, debes entender que eres moral y jurídicamente responsable de las consecuencias. Internet no es un juego, al desinformar puedes poner muchas vidas en riesgo, sobre todo en conflictos como los vividos en el territorio venezolano desde febrero, evita cometer una infracción. Comunicar es tanto un derecho como una responsabilidad.

No puedes permitir que las emociones te hagan decir cosas innecesarias en momentos de crisis. Hay que actuar con racionalidad y evitar difamar, calumniar, amenazar o insultar en las redes sociales, pues esto pude tomarse como un causal de delito según lo previsto en la Ley Contra Delitos Informáticos.

-En el caso de Venezuela, específicamente, internet es indispensable para saber lo que ocurre en el país, el uso de la red puede tener consecuencias buenas y malas depende de cómo se use y para qué. Dale un uso adecuado a tus perfiles en la red 2.0, pues también es parte de tu identidad y tu tarjeta de presentación.

-La desinformación es uno de los mayores problemas que existe en la comunicación. En los entornos de redes sociales es fácil difundir y hacer viral una información falsa, por ello cuando hagas una denuncia pública procura contar con el respaldo de ésta, es decir el material audiovisual, escrito o impreso que corresponda y valide la demanda, agrega datos como hora, fecha y ubicación esto hará más fácil la comprobación y verificación.

-Invadir la privacidad de una persona no es ético y tampoco legal, por ello no deben usarse los equipos tecnológicos para tal fin. No seas cómplice de estos actos.

-Evita utilizar perfiles falsos en una red social y sobre todo no hay que validar la información que proviene de estas cuentas, porque seguramente son maliciosas y pueden traerte consecuencias legales.

-Si quieres hacer una denuncia de algún hecho que atente contra los Derechos Humanos, debes darle rostro o identidad a tus demandas, los derechos deben exigirse. Porque el derecho que no se ejerce es un derecho que se pierde.

Gracias a los avances en las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC), es posible en la actualidad comprobar, verificar, contrastar y monitorear la existencia,  procedencia y veracidad de cualquier dato a través de las búsquedas avanzadas de Google, Google Images, Search de Twitter, Facebook, Youtube, entre otros. Los ciudadanos ante una situación que vulnere sus derechos puede llevar sus reclamos a la red 2.0 con la responsabilidad y la ética que ello amerita, porque no se pude defender un derecho para violentar el de lo demás.

Ley Especial Contra los Delitos Informáticos 

[email protected] Twitter @Mikangel777

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *