En marzo pasado durante 5 días México fue epicentro de la discusión sobre el Agua. Por un lado los gobiernos, empresas multinacionales y banca internacional se reunían el IV Foro Mundial, y por el otro, activista de movimientos sociales del mundo debatían sobre la situación y acciones en defensa del derecho al agua, en el espacio denominado Foro Internacional del Agua.
Las organizaciones sociales concertaron una declaración en la cual se expresa que el agua en todas sus formas es un bien común y su acceso es un derecho humano fundamental e inalienable. El agua es un patrimonio de las comunidades, de los pueblos y de la humanidad, principio constitutivo de la vida en nuestro planeta. El agua no es mercancía. Por eso rechazamos todas las formas de privatización, inclusive la asociación pública-privada que han mostrado su total fracaso en todo el planeta.
De la misma manera expresaron que la gestión y el control deben permanecer en el ámbito público, social, comunitario, participativo, con equidad y sin fin de lucro. Es obligación de todas las instituciones públicas locales, nacionales e internacionales garantizar estas condiciones desde la planificación hasta el control final del proceso.
En el país se cuenta con la buena experiencia de los Comités de Agua que constituye una forma de defender este derecho con una activa participación social, proceso que debemos consolidar para fortalecer el control social.
Caracas, 19.03.06.