Un puente al borde del colapso fue el detonante de una manifestación ocurrida ayer en el kilómetro 16 de la vía a El Pao. Habitantes de la comunidad Bajo Grande, cansados de esperar por la reparación del viaducto que da acceso a esta población, decidieron cerrar la carretera con troncos, ramas y otros objetos para protestar por la falta de solución a este problema.
“Se hizo una reparación aquí y se volvió a caer y nos tienen engañados, nos dijeron que dentro de 20 días nos daban una respuesta y ya va un mes y medio que dimos de plazo y todavía no hemos recibido nada. Tenemos que trancar la vía a ver si nos pueden parar aunque sea un poquito”, declaró José Lugo, habitante del sector.
“Nosotros estamos protestando porque tenemos tres meses con esto echado a perder”, expresó Héctor Luis Barreto, vecino de la zona.
Explicaron los residentes del sector, que a pesar de que el puente terminó de romperse hace un mes por las fuertes lluvias, la comunidad ha solicitado por dos años la restauración de esta estructura.
Altercados
Informó el comisario Saúl Guerrero, comandante de la comisaría de Francisca Duarte, que desde primeras horas de la mañana los oficiales trataron de dialogar con los vecinos, pero estos no quisieron cooperar para despejar la vía.
Por tal razón, una comisión de más de 20 funcionarios pertenecientes a las diferentes comisarías de Caroní se trasladó hasta el lugar para reactivar el tránsito y dispersar al grupo de protestantes que sumaban alrededor de 30 personas.
La protesta se salió de control cuando se produjo una disputa entre funcionarios de la Policía del estado Bolívar y los afectados. Según señaló Guerrero, cuando llegó el cuerpo de seguridad comenzaron a lanzar piedras y otros objetos contundentes contra los efectivos. “Nos cayeron a botellas, tienen bombas molotov, prendieron fuego”, señaló el oficial.
La acción de los pobladores motivó que los funcionarios utilizaran el equipo antimotín y lanzaran tres bombas lacrimógenas. “Las trancas son inconstitucionales, cuando usted tranca una vía está manifestando violentamente”, explicó uno de los efectivos a una de las vecinas; mientras la mujer reclamaba, “no tienen que venir tirando bombas lacrimógenas”.
Los vecinos de los sectores cercanos a Bajo Grande se quejaron de la acción policial y denunciaron maltratos. Yureima Bravo, acusó a los efectivos de golpear a uno de los manifestantes.
Detenidos por protestar
“Una señora que se dice llamar la líder del grupo está detenida”, informó Guerrero. La ciudadana, identificada como Noemí González, de 38 años, y Wilfredo Fermín, de 42, fueron arrestados en la Comisaría de Francisca Duarte por las acciones de protesta que emprendieron.
En horas de la tarde de este viernes, el comisario esperó las instrucciones de sus superiores para decidir si las dos personas pasarían a la orden de la Fiscalía del Ministerio Público.