El dirigente del Movimiento de Sindicatos de Base (Mosbase) y trabajador de Orinoco Iron, Orangel Palma, fue notificado de calificación de despido este martes: la empresa lo acusa de haber obstaculizado la producción de la briquetera por las protestas que en el último mes ha liderado, junto a los empleados de la planta estatizada en 2009.
Durante estas semanas de manifestación, el personal ha marchado entre 6:00 a 9:00 de la mañana por la avenida Fuerzas Armadas, contigua al portón de la fábrica.
Palma recriminó que se condene la protesta pacífica de los trabajadores y que se acuse al talento humano de influir en la baja productiva, cuando durante casi dos años la compañía estuvo paralizada como consecuencia de diversos hechos de corrupción denunciadas por el propio Gobierno.
Pese a que no hay responsables del desfalco perpetrado a las finanzas de Orinoco Iron entre 2009 y 2013, a la gerencia sí le preocupa cómo una marcha pueda afectar el desarrollo operativo.
Los empleados reclaman una transparente discusión del contrato, vencido desde hace seis años, así como se ajusten los salarios en más de un 30 por ciento como antesala a la discusión contractual. (Correo del Caroní)