Las alcaldías y gobernaciones del país todavía no han podido pagar el penúltimo aumento salarial ni de los bonos de alimentación, por cuanto desde el Ejecutivo nacional no les han bajado los recursos para cubrir las incidencias que eso conlleva.
El alcalde del municipio Mariño, Alfredo Díaz, precisó que en el caso de su ayuntamiento, para el anterior incremento de salarios requería 303 millones de bolívares, de los cuales el Gobierno central solamente envió 86 millones, lo que muestra una diferencia de 217 millones. Lo recibido equivale a poco más del 28% de lo necesario.
Indicó que eso los llevó a sacrificar algunos ítems establecidos en el presupuesto, para cubrir solamente los incrementos salariales, quedando pendiente la homologación del bono de alimentación que actualmente sobrepasa los 44.000 bolívares.
No obstante, asegura que todavía hay alcaldías de la entidad afectas al Gobierno nacional que pagan entre 13.000 y 15.000 bolívares de salario mínimo, así como entre 9.000 y 11.000 bolívares por cesta ticket, lo que hace evidente que no podrán pagar este año el más reciente aumento.
“Son aumentos politiqueros que no están planificados en el presupuesto nacional y, en consecuencia, afecta las asignaciones de los gobiernos regionales y municipales”, enfatizó Díaz.
Aseguró que la mayoría de las alcaldías y gobernaciones aún arrastran las incidencias de los anteriores aumentos salariales decretados por el presidente Nicolás Maduro.
Igualmente destacó que apenas anuncian el incremento, se disparan los precios de los productos alimenticios, convirtiéndolo en sal y agua, justo porque no se hacen planificaciones previas en el presupuesto nacional.
A su modo de ver, todo eso evidencia que no hay políticas económicas serias que garanticen de verdad el fortalecimiento del poder adquisitivo y salarial.
Dijo estar de acuerdo con los incrementos, pero sin que eso signifique que los gobiernos locales deban sacrificar obras para tener que honrar los compromisos adquiridos por el Ejecutivo nacional.
Solo nóminas
Díaz aseguró que la mayoría de las alcaldías de la entidad reciben el Situado Constitucional que les alcanza sólo para el pago de nóminas; en el caso de la de Mariño, cuyo presupuesto depende 85% de los ingresos propios, la entrada de dinero a las arcas municipales se ha visto mermado por el cierre de establecimientos comerciales, los cuales aportan los mayores tributos al municipio.
“Así nos quiere ver el gobierno nacional a las gobernaciones y alcaldías, es decir, sin recursos para realizar obras”, subrayó Díaz.
Juego
El alcalde Alfredo Díaz dijo estar convencido que con los constantes anuncios de aumentos salariales, el Gobierno central no sólo juega a ahogar aún más a la empresa privada, sino también a las gobernaciones y alcaldías, las cuales seguirán arrastrando las incidencias de deudas por ese compromiso que no podrán cumplir.