“Como se ha denunciado en incontables ocasiones, en Venezuela trabajar como integrante del equipo reporteril de cualquier medio de comunicación independiente se ha vuelto una labor de alta peligrosidad, por las continuas agresiones que reciben periodistas, reporteros gráficos y camarógrafos, durante las coberturas de las pautas que se les asigna”, dijo Expresión Libre en un comunicado.
Este jueves 11 de agosto se les violaron los derechos humanos a varios trabajadores de la comunicación por el simple hecho de estar haciendo su trabajo, recabar información para transmitirla al público, señala.
En Maracay, estado Aragua, durante una actividad organizada por el Colegio de Médicos de esa entidad y la Federación Médica de Venezuela en protesta por la crisis de salud, el reportero gráfico del diario El Siglo, Luis Torres, fue salvajemente agredido, lanzado al suelo y pateado, por un grupo que le exigía que no tomara fotos. El hecho ocurrió en los alrededores del Hospital Central.
Los agresores llegaron de forma amenazante hacia donde estaban los médicos protestando, tomaron fotos, rompieron las pancartas de los manifestantes y agredieron también a varios galenos. La cámara de Luis Torres fue destrozada. Como agresores son señalados los llamados “grupos de choque” del hospital que depende de Corposalud, relata la ONG.
Por otra parte, en Barquisimeto, estado Lara, en los alrededores del Centro Comercial Cosmos, durante un operativo especial de la Alcaldía de Iribarren que tenía como objetivo desalojar a los revendedores de teléfonos celulares y de otros objetos presuntamente producto de robos, los afectados que se oponían a la medida de desalojo agredieron a los periodistas María Laura Martínez de Telecentro, a quien golpearon en la cara y le robaron el celular corporativo y el micrófono; igualmente a Marcos Chaviel, de V+TV; a Emilisa Rodríguez, de la Alcaldía de Iribarren; al camarógrafo Ildemaro Graterol, de Telecentro, y al reportero gráfico de El Informador, Rafael Rodríguez.
“Estas agresiones se repiten con escandalosa frecuencia dada la instauración por parte del Gobierno de una política de impunidad en protección de los agresores y delincuentes, por lo general adeptos al partido oficialista, que llevan a cabo estos ataques, a pesar de las constantes denuncias ante el Ministerio Público y organismos policiales”, afirman los porfesionales.
De esta forma, al impedir la labor periodística se viola también el derecho de los ciudadanos a estar informados y de poder expresarse libremente.
“Esta combinación de agresiones e impunidad resulta desde todo punto de vista inaceptable en una sociedad democrática, como la que aspiramos la inmensa mayoría de los venezolanos. Al condenarla de la manera más enérgica, desde Expresión Libre nos solidarizamos con todos los periodistas, reporteros gráficos y camarógrafos victimas de estas acciones delincuenciales y le exigimos al Defensor del Pueblo y a la Fiscal General de la República, que actúen con celeridad y justicia para que se apliquen las sanciones previstas por las leyes”, agrega.
El Estímulo