Marco Antonio Ponce es investigador de Provea (Programa Venezolano de Educación-Acción en Derechos Humanos), una organización no gubernamental cuya finalidad es la promoción y defensa de los derechos humanos, en particular los derechos económicos, sociales y culturales.
¿Cuántos años lleva funcionando Provea?
Provea nace en octubre de 1989, en los últimos días de la convulsionada década del ochenta. Poco tiempo después del estallido social denominado El Caracazo y de la Masacre de El Amparo, íconos de la brutalidad policial y militar, y de políticas gubernamentales antipopulares que caracterizaron a los gobiernos puntofijistas. En sus más de 20 años ha realizado diferentes acciones orientadas a la promoción y defensa de los derechos humanos, principalmente en derechos económicos sociales y culturales (DESC)
En la actualidad mantiene su enfoque en DESC, aunque también se dedica a promover y defender derechos civiles y políticos. Su trabajo incluye un contacto directo con la comunidad, principalmente en sectores populares. Por otra parte, realiza actividades educativas y de investigación. Uno de sus trabajos representativos es el Informe Anual, que es un estudio sobre la situación de derechos humanos en Venezuela y ya lleva 21 ediciones. Le ha dado un gran prestigio a nivel nacional e internacional por la rigurosidad y exhaustividad en los temas planteados.
¿Cómo era antes? ¿Había presiones gubernamentales o de otro tipo? ¿Las hay ahora?
Provea se ha mantenido fiel a sus principios, a pesar de los diferentes cambios culturales, sociales, políticos y económicos que ha experimentado Venezuela. Por estos días el gobierno la acusa, junto a las otras ONG, de ser una institución politizada dedicada a trabajar con partidos de oposición venezolanos. Sin embargo, no es un planteamiento nuevo, ya en otros gobiernos ha sido señalada de estar en contra del Estado. A pesar de ello, su trabajo la reivindica como una organización popular e independiente que aspira aportar un grano de arena en la consolidación de un Estado en el que se garantice la dignidad de sus habitantes.
¿Cuál es la situación actual de la protesta en Venezuela?
En Venezuela el derecho a manifestar está consagrado en el artículo 68 de la Constitución. Por ello, la máxima legislación nacional reconoce que todas y todos tenemos la posibilidad de realizar protestas pacíficas, concentraciones públicas, marchas, huelgas, entre otras modalidades. Sin importar tendencia política, condición social, preferencia sexual, motivaciones, tipo de demandas, etc.
Es importante destacar dos cosas, primero que es un derecho humano, y segundo que está garantizado en la Constitución. De esta manera, cualquier expresión que intente limitar o anular su ejercicio es por un lado, una violación de derechos humanos, y por otro, una violación a la Constitución.
¿Cómo ha sido la evolución de las protestas pacíficas en los últimos años?
En los últimos 10 años (hasta octubre de 2009) la organización Provea registró un total de 16.790 protestas en todo el territorio nacional. En los últimos 3 años, el número de protestas se ha superado año tras año: en 2007, 1.576; 2008, 1.763; 2009, 2.893. El aumento de las protestas lleva intrínseco un incremento en el accionar represivo de los cuerpos de seguridad, llegando a la sorprendente cifra de 584 personas heridas y 676 detenidas, tan solo en 2009. Y el dato más impresionante lo encontramos en el número de personas que han perdido la vida por ejercer este derecho humano, unas 35 en la última década, sólo por el accionar de los cuerpos de seguridad, sin contabilizar el asesinato de manifestantes por parte de civiles armados. Evidenciando la ausencia de una política democrática de orden público por parte de los cuerpos de seguridad. Lo que nos lleva a inferir que el Estado viola flagrantemente los derechos humanos de los venezolanos.
Las cifras de los primeros 4 meses de 2010 revelan otro año encendido, en los que se han registrado al menos unas 1.343 protestas. De esta manera, Venezuela se convierte en uno de los países de Sur América, en los que más se protesta y más se reprime, si hacemos una comparación con el resto de la región observamos que la frecuencia de acciones de protesta en otras naciones es claramente inferior, incluso en los niveles de conflictividad social. Para hacer esa comparación se puede acceder al portal del Observatorio Social de América Latina, de Clacso, que hace un monitoreo riguroso de los conflictos sociales en la región, la dirección es www.clacso.edu.ar
¿Existen datos sobre la distribución geográfica de las protestas?
Sí, el monitoreo nos permite identificar el desarrollo de los conflictos en los diferentes estados del país. Por ejemplo, la región capital históricamente ha concentrado la mayor cantidad de movilizaciones y acciones de calle, porque es donde se encuentran las principales instancias de poder. Sin embargo, desde hace tres años, los conflictos se han trasladado con mayor frecuencia el resto de los estados, como consecuencia de gestiones públicas deficientes y de políticas laborales alejadas de las demandas de los trabajadores, también por los altos índices de inseguridad, entre otros motivos. De esta manera, el estado Zulia, lleva dos años consecutivos siendo la entidad en la que más se realizan protestas, en 2009 alcanzó 609 acciones de calle, superando al Distrito Capital con 421 y Miranda con 350. Otro estado que refleja una tendencia en constante crecimiento es Bolívar, por el interminable conflicto entre trabajadores y gobierno, principalmente por el fracaso de políticas como el Plan Guayana Socialista. Por otra parte, con la reciente crisis eléctrica y constantes fallas en el servicio de agua potable encontramos al país convulsionado por protestas de punta a punta. Aunque estos serían solo algunos ejemplos.
¿Qué sectores de la sociedad protestan más? ¿Razones?
Los vecinos y los trabajadores son los actores sociales que más exigen reivindicación de derechos. Llama poderosamente la atención que en la mayoría de los casos, son personas de los sectores populares, y en gran medida afectas al proceso de gobierno. Sin embargo, ante la ausencia de respuesta y solución a sus problemas salen a la calle “como último recurso”, con la esperanza de ser escuchados y que sus problemas sean resueltos.
Para leer la entrevista completa visite conflictove.wordpress.com