La paralización de la Siderúrgica del Orinoco (Sidor) cumplió 32 horas en medio de un clima de confrontación política, dispersión sindical y violencia. Aunque la protesta inició el 17 de enero en reclamo al pago de la diferencia de utilidades y la aplicación del tabulador.
El presidente de Sutiss, José Luis Hernández, convocó el paro discrecionalmente, sin consultar al comité ejecutivo. Aun así, la incidencia en las acerías de palanquillas y planchones fue total, lo que significa un aproximado de 18 mil toneladas de acero líquido que se dejaron de producir entre lunes y martes.
Planta de pellas, Midrex y despacho operaron con normalidad según informaron trabajadores de esas áreas.
Al portón III acudieron este martes 18 de enero en la mañana representantes de casi todas las corrientes sindicales, pues por mensaje de texto se les había convocado con el fin de ejercer presión a propósito de las elecciones en Sutiss. La mayoría asistió con la expectativa de que pudiese definirse una estrategia en medio de la división.
Pero el propósito no se materializó. Algunos hablaron a los trabajadores pidiendo la unidad y claridad del movimiento. Otros creen que es urgente solicitar la destitución del presidente de Sidor, Carlos D’ Oliveira, a quien han calificado como el presidente “turista”. Hubo, por supuesto, alusiones a la última década en la que -según – la dirigencia entregó los beneficios al patrón, así como quienes explicaron los intríngulis para la aplicación del tabulador y las presuntas zancadillas de dirigentes del control obrero.
La mayoría de los sidoristas pasó de largo a las áreas, mientras que los cercanos a cada corriente permanecieron en el lugar. En un santiamén, Hernández consultó y aprobó la extensión del paro hasta las 3:00 de la tarde y posteriormente la medida fue extendida hasta las 11:00 de la noche.
Grupos de choque
Mientras decidían sobre la paralización en las áreas, Hernández hizo alusión a la presencia de delegados sindicales que presuntamente “sabotearían” la acción. La aseveración fue replicada por el dirigente de Sutiss y vocero del control obrero, José Clemente Tata, quien invitó a Hernández a que fuera responsable y asumiera las consecuencias de sus actos.
El simple intercambio, pronto generó la confrontación entre dos bandos que estuvieron a poco de irse a los golpes.
Beneficios pero ¡ya!
Lo que no generó violencia, pero sí suspicacia entre las corrientes, fue el comunicado publicado por Sidor en el que atribuye el pago impuntual a Sutiss. Explica que el 25 de octubre de 2011, la gerencia invitó al comité ejecutivo de Sutiss a una sesión de trabajo con el objetivo de definir el tiempo de referencia para el pago de las posibles variaciones por concepto de utilidades, tradicionalmente canceladas en enero.
Según Sidor Informa, la representación sindical solicitó tiempo para tratar el tema en comité ampliado. El 29 de octubre, la empresa invitó a Sutiss a una reunión el 3 de noviembre, la cual no se realizó por la inasistencia de la dirigencia, alega la estatal.
Representantes de la siderúrgica expresaron que se le solicitó al sindicato que se pronunciara al respecto el 11 de enero, para lo cual no hubo respuesta. (CorreodelCaroní; 19.01.2011)