El Colegio de Médicos del estado Bolívar hizo ayer un llamado a las autoridades del Instituto de Salud Pública (ISP), a acatar el dictamen judicial que los obliga a cancelar una serie de beneficios laborales a 19 médicos de la Maternidad Negra Hipólita, en el municipio Caroní.
La presidente de este gremio, Concepción Liendo, acompañada del secretario de organización, Ángel Granados, y Gustavo Ramírez, vocero de los médicos de la Negra Hipólita, señaló que las autoridades de salud regional pretenden incumplir un dictamen tribunalicio, tras la decisión de una demanda interpuesta por los galenos contra el ISP que establece la cancelación de beneficios como bono nocturno, antigüedad y alimentación.
Gustavo Ramírez explicó el proceso judicial llevado contra las autoridades de salud regional por conceptos laborales no cancelados entre el 2002 y 2006, en medio de triquiñuelas y dilaciones por parte del patrono para evadir su responsabilidad con este sector de la salud.
Dijo que hace cuatro meses fue dictada la sentencia donde se aprueba el 74% de la demanda, que significa que el ISP debe desembolsarles a estos médicos por conceptos laborales un monto de 620 millones de bolívares.
Hospitales en colapso
La presidenta del Colegio de Médicos desnudó la realidad del sistema de salud regional, dejando ver lo que para nadie es un secreto en los centros dispensadores de salud. Comentó en primer lugar el caso de la Maternidad Negra Hipólita, y de los hospitales Ruiz y Páez, Gervasio Vera Custodio (Upata) y Arnaldo Gabaldón (Caicara del Orinoco).
“En el Hospital Gervasio Vera Custodio la gente está atribulada, porque este centro de salud se está cayendo”, señaló la representante del gremio médico, haciendo un llamado a meterles la lupa a las autoridades del Ministerio de Salud. En cuanto al hospital de Caicara del Orinoco el déficit de insumos y medicamentos se agudiza; mientras en el Ruiz y Páez los trabajos de rehabilitación no terminan de arrancar como deben ser. (Carolina Maffia, Correo del Caroní, 27.07.10)
