Un poco más de seis meses tiene ya el ambulatorio de Nueva Bolivia esperando por ser rehabilitado en lo que al techo se refiere. La comunidad exige respuestas de los gobernantes
Luego de seis meses funcionando medianamente, el ambulatorio de Nueva Bolivia, dentro del municipio Tulio Febres Cordero del estado Mérida, continúa padeciendo por el problema inicial, basado en la necesidad urgente de sustituir el techo de asbesto que tiene por concreto o acerolit. Según algunas personas de la comunidad, la situación es la misma, pues, a pesar de los ofrecimientos de la Corporación de Salud del estado, de sustituir el techo, hasta la fecha no se ha realizado esta labor, por lo que consideran que se ha desmejorado la salud en el municipio.
En este sentido, Coromoto Valero, habitante de Nueva Bolivia, denunció esta situación: «los gobernantes, comenzando por el Alcalde, se han hecho de la vista gorda, estando el módulo al lado de la Alcaldía, esto es increíble, pareciera que no tuviésemos doliente».
La fuente reveló que al parecer, al Alcalde no le ha dado tiempo de trasladarse hasta el ambulatorio, «a pesar de quedarle tan cerca», para que pueda constatar de primera mano las condiciones en las cuales se encuentra el techo de asbesto, donde funciona además el Consejo de Protección al Niño, Niña y Adolescente, las oficinas de Ipostel, la escuela de labores, inmunizaciones y hasta un Simoncito que tiene seis meses cerrado.
«El ambulatorio en el año 2003 atendía partos en donde queda actualmente el Centro de Diagnóstico Integral (CDI) de Nueva Bolivia, pero fue arrancado del lugar, en el 2004, cuando el Gobierno nacional, le pide a la Gobernación que ubiquen un terreno para construir un CDI y las autoridades locales, junto con las regionales, a través de Corposalud, acordaron trasladar el ambulatorio a donde actualmente se encuentra, y tumbar la estructura para hacer una nueva para el nuevo centro de salud», aclaró.
Valero aseguró que el techo no está adecuado para la salud de las personas que laboran en el módulo, pues trae como consecuencia afecciones pulmonares a la comunidad, debido al polvillo que desprende el asbesto, situación que -aseveró- fue detallada por escrito a los organismos competentes, a través de un informe emitido por el Cuerpo de Bomberos de la localidad. «La Corporación de Salud no ha venido más a ver lo del techo y ya tiene seis meses cerrado el ambulatorio, dejando de prestar un servicio de salud al colectivo, pues aquí está perjudicada toda la población de Nueva Bolivia».
Desespero
La comunidad de Nueva Bolivia hizo un llamado a los organismos de Gobierno en todas sus instancias, para que agilicen los trabajos de mejoramiento del ambulatorio, pues el CDI no es apto para atender la demanda se presenta en el municipio. (Rodney Añez, Diario Los Andes, 21.07.11)