«Más de ochenta niños han muerto este año en la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátrica del Hospital Central. Es decir, se maneja un promedio de diez fallecimientos mensuales, registros que deben llamar a la preocupación a todas las autoridades del Ejecutivo y Legislativo, a fin de que decidan de una vez por todas atender esta importante área del primer centro asistencial, que no cuenta ni con insumos ni material médico-quirúrgico.»
De acuerdo con lo expresado por los doctores Pedro Lobo, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos, y el infectólogo pediatra José Vicente Franco, esta área está atravesando una situación bastante grave, que es la falta de insumos, materiales que son básicos para mantener un control sobre las bacterias, gérmenes que afectan a esta unidad, como son los gorros, tapabocas, guantes estériles, sondas, entre otras cosas que brillan por su ausencia.
«Todas las mañanas, cuando los médicos llegan, antes de examinar a los pacientes preguntan qué es lo que no hay, para que los familiares lo compren. Se supone que la Unidad debe ser dotada por el Hospital, pero también se sabe que el presupuesto de este centro no está acorde a la realidad, y esto tiene a los galenos contra la pared», precisaron.
Creen que Lotería del Táchira hace un esfuerzo, apoyando la Uci Pediátrica y a Neonatal. Sin embargo, no es suficiente, porque la gran cantidad de niños que amerita esta asistencia, consume rápidamente los insumos.
Por otra parte, manifestaron la preocupación por el mantenimiento y aseo de estas unidades, entendiendo que el servicio de limpieza y saneamiento del Hospital Central no tiene material para trabajar, hay una sola mopa para limpiar todo, entonces limpian con la misma mopa que utilizaron en emergencia, a la Uci pediátrica o la Neonatal, y esto quiere decir que están arrastrando gérmenes de un lado hacia otro, favoreciendo las infecciones cruzadas.
«Esto es muy grave, aunado a la baja calidad de los antibióticos que hoy en día se están recibiendo», apuntaron.
Esta situación se traduce en cifras muy lamentables -según los especialistas- hasta la fecha se han dado 83 fallecimientos neonatales en el año 2011; por supuesto que si se compara con la del año 2010, la cifra es mucho menor, pero no se puede esperar que se tengan 260 muertes, como las registradas el año pasado, para empezar a prender las alarmas.
«La situación es complicada y preocupa que el doctor Gerson Díaz, presidente de Corposalud, justifique las muertes neonatales y la falta de asistencia adecuada de la Unidad de Cuidados Intensivos neonatales y pediátrica, en la carencia de recursos. Lamentablemente esta no debe ser la actitud, se debe ser más activo y llamar a la conciencia a los organismos encargados de velar por la salud del estado Táchira», subrayaron.
Recordaron que el estado no es sólo la Gobernación, también es el Consejo Legislativo Estadal, autoridad que también tiene responsabilidad en lo que está pasando en el hospital, porque ellos utilizan muchas veces estas coyunturas para hacer jugadas políticas.
«Hasta la fecha no ha aparecido ningún diputado del CLE para verificar cómo está la situación del Hospital Central,
Estas unidades son muy costosas, pero cuando se planificó la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales se tenía que haber programado un presupuesto especial para estas unidades, y no trabajar con los recursos generales del Hospital.
«Hay mucho gasto, tanto de personal especializado, como de recursos desde el punto de vista logístico. En cuanto a los antibióticos que se utilizan, no son de calidad, no dan la confianza para manejar infecciones severas, los que deben indicarse son muy costosos, pero le salvan la vida a un paciente», sostuvo.
Así mismo indicaron que los residentes de pediatría están haciendo esfuerzos sobrehumanos para atender los niños, inclusive, están haciendo procedimientos empíricos con botellas de suero, construyendo sistemas de drenajes de tórax, porque no tienen material, utilizan unos guantes que no son los adecuados, están también usando inyectadoras desechables varias veces en distintos niños y quizá estas sean unas de las tantas consecuencias por las cuales las muertes por sepsis se han incrementado en las últimas semanas.
Recomendaron una intervención urgente del área de Cuidados Intensivos Neonatales, porque si se mantiene la actitud que impera en este momento, se van a tener las cifras que se manejaron el año pasado. (Nancy Porra, La Nacion, 25.08.11)