Las familias del sector Vista Hermosa en Julián Blanco, Petare, que quedaron sin hogar a consecuencia de las lluvias el pasado mes de octubre, recibieron el beneficio de manos del gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski
“Me sentí muy feliz cuando supe que me iban a dar el certificado, yo tenia la esperanza de que algún día cambiarían las cosas cuando perdí mi casita. No creo esto aún, ahora voy a estar en una casa digna con mis nieticos, mi hija y su esposo. Estaré eternamente agradecida”, comentó Regina Piñeres, conteniendo las lagrimas de felicidad, que muchas veces hicieron que se detuviera a respirar para continuar con la entrevista. Rostros de alegría como el de Regina, sobraron ayer en la segunda entrega de certificados para la adquisición de viviendas, en mercado secundario, otorgados por el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski. La cancha de baloncesto de la comunidad Julián Blanco, sector Vista Hermosa de Petare, fue el escenario para que más de 50 familias recibieran el certificado notariado para obtener una vivienda “digna” o terreno apto para la construcción. Asimismo les otorgaron certificados de materiales de construcción a otros cuatro afectados. “No estamos pasando el problema para otro lado, sino solventándolo en una zona declarada vulnerable años atrás y que la naturaleza les quitó sus casas. Ahora con este recurso van adquirir en el mercado secundario o en otro caso, en cualquier zona del estado Miranda”, indicó Capriles. La donación fue entregada a los damnificados que perdieron sus casas a consecuencia de las lluvias, el pasado mes de septiembre, en un deslizamiento. Y anteriormente, se había realizado una primera entrega a 57 afectados del mismo sector, que con la entrega de hoy suman casi 100 familias beneficiadas. Agregó que han sido entregados más de 10 mil certificados en todo el estado, atendiendo a más de 50 mil personas “a lo largo y ancho de la entidad”. Capriles Radonski, anunció que el estado Miranda está entrando en un proceso de cambio, donde “hay que construir para todos”. Aseguró que si el más necesitado era “rojo rojito” debía ser el primero en la lista de afectados, porque sino no se estaba logrando el cometido y “estaríamos repitiendo lo mismo”. Entre tanto, la arquitecta Mariela Rivas dio recomendaciones a los favorecidos al momento de realizar su compra, reiterando que era necesario que los funcionarios de Protección Civil Miranda realizaran una inspección previa, para verificar que es un sitio seguro. En otro orden, futuras madres de la comunidad Julián Blanco recibieron, de manos del gobernador, canastillas con artículos para bebés, como parte de las donaciones realizadas a las personas afectadas por el mencionado deslizamientos.
Rostros de agradecimiento
Angela Quiñonez (Beneficiada):
“Estoy muy contenta, feliz. Gracias a Dios podré tener mi casita y le daré un techo a mi nieto”
Cristina García (Beneficiada):
“Cuando me entregaron el papel aún no lo creía. Pensaba que nos iban a dejar olvidados y ya soy dueña de mi casa”
Jorge Córdoba (Beneficiado):
“Estoy muy agradecido por la ayuda inmediata que nos prestaron. Y le digo a los demás que tengan a esperanza porque si es verdad”.
(Yohana Marra, Diario La Voz, 21.10.2010, http://www.diariolavoz.net/seccion.asp?pid=18&sid=1050¬id=344061)