Actualmente en Venezuela existe
una profundización de la represión y el uso del Poder Judicial para impedir que los trabajadores, especialmente del sector público, reclamen sus derechos. «500 dirigentes han sido sometidos a juicios, cárcel e interrogatorio de los cuerpos de seguridad», afirmó la sindicalista Marcela Máspero.
La coordinadora de Unión Nacional de Trabajadores dijo que «la persecución contradice lo de Maduro, presidente obrero, cuando criminaliza la huelga y la lucha por la contratación colectiva».
José Luis Alcocer, del Movimiento Unidad Matancera, señaló que sigue la presencia de la Guardia Nacional Bolivariana en la Siderúrgica del Orinoco ante el disgusto de los trabajadores por la firma inconsulta del contrato colectivo 2014-2016 entre el gobierno y directivos de Sutiss afectos.
«Obviaron las cláusulas de jubilación y la tabla de cálculo, puntos de honor en las negociaciones», dijo Alcocer. Agregó que hay una tensa calma en Sidor, que opera a 30% de su capacidad por falta de insumos y repuestos.
Alcocer recordó que tres sindicalistas de Sidor están presos hace dos semanas por exigir en una protesta que dieran a conocer el texto del contrato. Máspero denunció que en el sector salud se sataniza al personal administrativo y médico por alertar sobre la escasez de medicinas e insumos en los hospitales. (Ana Díaz, El Nacional 30.09.2014)
