La Federación Nacional de las Sociedades de Padres y Representantes (Fenasopadres) aseguró que la muerte del adolescente Kluiverth Ferney Roa es una demostración de “la precaria situación de los derechos humanos en nuestro país y la inacción del Estado venezolano como supuesto garante de estos derechos”.
La organización se pronunció, en específico, en cuanto al derecho a la manifestación pacífica y la prohibición del uso de armas de fuego en las labores de reestablecimiento del orden público cuando se llegasen a producir focos de violencia.
Después que algunos voceros gubernamentales se refirieran a la muerte del joven como “un caso aislado”, Fenasopadres argumentó que “se trata de nuevo de un niño indefenso, uno más en la ola de atentados contra jóvenes. En este caso el muchacho intentó protegerse de la arremetida policial corriendo para proteger su seguridad y salvar su vida”.
En el comunicado público también se exige que “se esclarezcan y castiguen las posibles responsabilidades de funcionarios de los despachos de relaciones interiores y defensa en la ejecución de estas acciones”.
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(Comunicado oficial de Fenasopadres / 25.02.2015)
