Los problemas que afectan a la educación en el país, incluyendo lógicamente al estado Lara, originaron una nueva protesta pública por parte de docentes que este lunes cerraron durante varias horas la carretera Barquisimeto-Carora, a la altura de Tintorero, obligando a gran cantidad de viajeros, muchos de ellos camioneros y gandoleros, a interrumpir sus recorridos.
En esta oportunidad los protagonistas de la manifestación eran docentes, administrativos y obreros del liceo creación coronel Mariano Peraza, ubicado en Quíbor, anexo al Pastor Cortéz Vásquez.
Esa es una institución con una matrícula de 460 alumnos cuyo personal aún no ha cobrado la primera quincena de sueldo, pese a haber sido inaugurada por la ministra Hanson en el 2012.
A las siete de la mañana colocaron cauchos viejos y restos de árboles impidiendo el desplazamiento automotor mientras mostraban pancartas en las que exteriorizaban sus peticiones.
«Docentes, obreros y administrativos sin comida que llevar a nuestros hogares”, «100% revolucionarios, pero sin pago”, «¿Dónde está el presupuesto de las creaciones?, también tenemos necesidades”, se leía en tres de ellas.
Katherina Vásquez, una de las participantes en la protesta, explicó que han ido a la Zona Educativa y hasta al Ministerio de Educación, en Caracas y lo único que les dicen es que tengan paciencia, que algún día les comenzarán a pagar.
«Pero hay algo más grave y es que en el ministerio no aparece en ninguna parte el liceo Mariano Peraza de Quíbor”, manifestó Beatriz Martínez, otra docente.
Al sitio de la protesta llegaron uniformados de la Guardia Nacional y de la Policía de Lara para mantener el orden.
Un suboficial de la GN trataba de convencer a los manifestantes sobre la inconveniencia del cierre de la vía, pero de nada valían sus argumentos pues exigían una información oficial desde el ministerio de Educación, la cual nunca llegó.
«Esto no puede ser, que nos impidan transitar por las carreteras, como lo establece la Constitución”, argumentaba uno de los viajeros con señales de alteración.
«Vayan a manifestar a la gobernación, o a la Zona Educativa, que es con quienes tienen el problema; nosotros no tenemos nada que ver con eso ni podemos resolverles nada”, explicaba inútilmente otro.
Mientras tanto, camioneros como José Rondón, esperaban pacientemente se suspendiera la protesta.
«Yo vengo de Puerto La Cruz; voy hacia Mérida y me encuentro con esto y no puedo hacer nada sino descansar obligatoriamente”, expresaba.
«Yo vengo de Upata, también voy hacia Mérida y estoy varado aquí desde las siete, esperando se cansen y nos dejen seguir”, dijo por su parte Nilson Ramírez, otro camionero.
«Esto es todas las semanas que cierran la carretera, en un sitio o en otro, pero ya en Lara esto se está convirtiendo en una guachafita por falta de autoridad”, manifestaba una señora, aparentemente pasajeras de un colectivo.
De vez en cuando permitían el paso de un vehículo pero lo cerraban nuevamente.
Uno de los viajeros, a sugerencia de un guardia nacional, extrajo de su camión un extinguidor y apagó las llamas de los cauchos, pero el cierre persistía, hasta las 9 y 45, aproximadamente, cuando los manifestantes consideraron haber logrado en parte su objetivo de llamar la atención sobre la problemática que está afectando al personal del liceo quiboreño.
A las diez se abrió el paso en ambos sentidos y el tránsito comenzó a moverse, aunque lentamente dada las cantidad de unidades, sobre todo de carga. (Hugo Boscan, El Impulso, 19.13.13)