No sólo los usuarios del Hospital Tipo I de Boca de Uchire están disgustados por la falta de médicos especialistas y lo descuidada que está la estructura del centro de salud. En una visita efectuada por El Mío a ese nosocomio, hasta los mismos trabajadores demostraron su descontento por las condiciones en las que deben trabajar.
A simple vista, el hospital aparenta estar en buenas condiciones, pero después de un recorrido por las instalaciones se evidencia el descuido que hay en todas las áreas, entre ellas los cuartos donde se atienden las emergencias. Estos fueron ampliados para mayor comodidad, pero ahora hay un detalle: cuando llueve, el agua se cuela por las láminas del techo de cielo raso, y así es en todo el hospital.
“Todo se moja cuando llueve, los cuartos son llenan de agua y aunque hemos notificado la situación cientos de veces, nada que reparan el techo”, dijo una de las enfermeras, que prefirió no dar su nombre.
En cuanto a los dos quirófanos existentes, aunque el aire acondicionado funciona muy bien –el ambiente se mantiene bien frío- no están habilitados porque cuando llueve, los residuos de las cloacas comienzan a salir por los inodoros y contaminan las salas, así que los pocos aparatos que hay tienen alrededor de una década que no se usan.
Los baños del área de hospitalización tienen mucho tiempo no los limpian a profundidad y las manchas en el piso, pocetas y paredes son más que evidentes.
Una médico rural que estaba al momento del recorrido, aprovechó para denunciar las condiciones deplorables del cuarto de descanso, donde “no provocar ni dormir de los incómodo que es”.
Dijo que el fin de semana que llovió toda la noche en Boca de Uchire, la habitación se anegó por la cantidad de goteras que tiene en el baño, “y es lo mismo que sucede en todo el hospital con cada aguacero que cae”.
En el cuarto de los choferes es peor, el colchón no lo pueden utilizar porque permanece con un pozo de agua a consecuencia de las goteras.
La sala donde preparan los implementos para atender a los pacientes (inyecciones, gasas, medicamentos, entre otros) tiene un olor a humedad tan desagradable que no se puede estar allí por más de un minuto, sin mencionar la basura que dejan regada y lo viejo y destartalado que están los estantes y mesas de trabajo.
En espera
Los trabajadores del hospital de Boca de Uchire, el único que hay en el municipio San Juan de Capistrano y a donde llegan todas las emergencias de la zona y las que ocurren en la troncal 9, tienen la esperanza de que pongan a funcionar pronto la planta de tratamiento que están haciendo en la parte de atrás para que mejoren los servicios a los pacientes.
“Si mejoran el hospital se necesita también más personal, sobre todo médicos especialistas para las consultas, porque aquí son sólo siete médicos rurales y no es suficiente”, dijo la enfermera.
Mientras que la doctora señaló que deben abocarse también a la seguridad del centro de salud porque a toda hora están expuestos a que lleguen los delincuentes y los asalten allí adentro.
El diputado suplente de la Asamblea Nacional, Juan Carlos de Sousa, señaló que están inspeccionando el hospital para presentar una propuesta de mejoramiento de la estructura, ambulancia nueva, ampliación del área de hospitalización y dotación de equipos. El proyecto será entregado a la comisión de Administración y Finanzas de la AN. (Florángel Farías, El Tiempo, 27.08.12)