En el transcurrir de los años desde que se descubrieron los primeros casos de sida a principios de la década de los años 80, la epidemia de VIH ha ocupado lugares preocupantes en la escala de las 25 principales causas de muerte en el mundo.
En cuanto a la mortalidad por VIH/sida en una revisión de los Anuarios de Mortalidad del Ministerio el Poder Popular para la Salud (MPPS) en Venezuela, se evidencia un aumento progresivo de la mortalidad.
Para el año 2003 ocurrieron 1.267 defunciones, que ocupaban la posición 16 dentro de las 25 principales causas de muertes y representaban el 1,10% de todas las causas de muerte.
En el año 2007 se registraron 1.670 defunciones por complicaciones del sida, ocupando el puesto 12 dentro de las 25 principales causas de muerte y representando el 1,32% del total de causas y en el año 2010 se reportaron 1.830 muertes asociadas al sida, ocupando el número 14 dentro de la misma escala y representando el 1,32% del total de causas de muerte.
Cabe destacar que en el estado Nueva Esparta se reportaron 432 defunciones por complicaciones asociadas al sida desde el inicio de la epidemia en el año 1.985 hasta el mes de junio del año 2013.
En Venezuela, desde hace varios años, las personas con VIH están en vilo, por las constantes fallas e interrupciones en el suministro de medicamentos antirretrovirales, la escasez de reactivos para realizar pruebas de carga viral y CD4 que sirven para determinar si los medicamentos están haciendo efecto o si por el contrario existe la necesidad de cambiarlos por otros más potentes.
A todo esto, se le suma el desabastecimiento de fórmulas lácteas que sustituye la lactancia materna, ya que las madres que tienen VIH no pueden amamantar porque la lecha materna es una vía de transmisión del virus.
Además, en el área de cirugía escasean los kit de bioseguridad que protegen al equipo médico y al personal de salud que atiende intervenciones de personas con VIH.
La ausencia de programas oficiales de prevención del VIH por parte del MPPS ha sido reconocida por el Programa Nacional de Sida ante Naciones Unidas en su informe correspondiente al año 2012; y la escasez de condones masculinos y femeninos para distribución gratuita.
“Resulta preocupante que el ministerio de salud no esté adoptando medidas para evitar que las personas se contraigan el VIH”, manifestó Jhonatan Rodríguez, presidente de la Organización StopVIH.
Rodríguez enfatizó que, “la salud no es una dádiva. El Estado venezolano tiene la obligación constitucional de garantizar la salud y de preservar la vida de todos los ciudadanos que hacen vida en el país”.
En este sentido, “las autoridades competentes en el caso, tiene el deber de suministrar los medicamentos antirretrovirales, los reactivos para pruebas, así como proveer los condones y ponerlos al alcance de todas las personas, sobre todo de las poblaciones que se encuentran en mayor riesgo: adolescentes, pobres, personas con VIH, mujeres, personas con discapacidad, hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres, entre otras”, puntualizó.
El presidente de StopVIH expresó que, “es muy triste que el panorama venezolano respecto a la epidemia de VIH no es para nada alentador, si no se activan mecanismos efectivos para la prevención de la epidemia en Venezuela, no se logrará reducir los índices de nuevas infecciones y el virus seguirá en la escala dentro de las 25 principales causas de muerte, aunque la tendencia global sea contraria”.
Para mayor información acerca de la Organización StopVIH visita www.stopvih.org y sigue @StopVIH en la red social tuiter. (Roslinda García, Prensa StopVIH, 26.08.13)